Alberto Fernández definió los reemplazos de Claudio Moroni, Elizabeth Gómez Alcorta y "Juanchi" Zabaleta con tres mujeres de absoluta confianza y sin consultar a Cristina Kirchner o Sergio Massa.

La definición de las nuevas ministras se circunscribió a charlas del círculo más cercano al Presidente, en las que tallaron fuerte Santiago Cafiero y Juan Manuel Olmos.

Para el ministerio de Desarrollo Social, se designó a la diputada Victoria Tolosa Paz quien ya había ocupado el cargo de titular del Consejo Económico Social en el primer tramo del gobierno, antes de encabezar la lista de diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires que perdió con Juntos por el Cambio en las legislativas del 2021.

En el caso del Ministerio de Trabajo, Alberto a eligió a Kelly Olmos, una histórica militante del PJ porteño que fue parte del viejo Concejo Deliberante y también integró la Legislatura porteña, ya con la ciudad autónoma. De aquellos años se conocen con el presidente.

La definición de las nuevas ministras se circunscribió a charlas del círculo más cercano al Presidente, en las que tallaron fuerte Santiago Cafiero y Juan Manuel Olmos.

Este nombramiento es el más sensible en el universo kirchnerista no sólo por la importancia del Ministerio de Trabajo sino además porque Kelly Olmos fue mano derecha de Carlos Corach y ministra de Hacienda de Jorge Domínguez, el ultimo intendente que nombró Menem. Sus vínculos con el menemismo son innegables, pero hace mucho tiempo que venía militando en el espacio de Juan Manuel Olmos.

Un dato que tiene repercusiones en la eterna interna del peronismo porteño. Acaso por eso la noticia no cayó bien en el mundo de Héctor Recalde, uno de los referentes kirchneristas del mundo laboral, ni en el entorno de su hijo Mariano. El senador nacional es uno de los líderes de La Cámpora en el peronismo porteño, de relaciones siempre tensas con Juan Manuel Olmos.

El vicejefe de Gabinete, uno de los pocos operadores de nivel que le quedan al Presidente, tenía a Kelly Olmos -con quien comparte apellido pero no son parientes-, como integrante de la mesa chica de su agrupación.

Por último, para Mujeres, Géneros y Diversidad fue nombrada Ayelén Mazzina, secretaria de la Mujer de San Luis en un gesto al gobernador puntano Alberto Rodríguez Saa y al colectivo feminista.

Kelly fue impulsada por el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, con quien comparte apellido pero no tiene ningún parentesco, y forma parte de la mesa chica del ex Jefe de Asesores del Presidente.

Alberto quería definir en soledad los nombres de los tres reemplazantes de Moroni, Alcorta y Zabaleta. Su argumento había sido "los que se van son míos así que yo defino a los que vienen", según lo escucharon decir horas antes de la definición de los relevos.

Esta vez los ministros renunciaron por voluntad propia, no por presiones de Cristina o crisis de gestión. Más allá de casos personales -como los problemas de salud de Moroni- el denominador común fue la falta de liderazgo de Alberto. Básicamente compartieron la queja de la falta de un diálogo frecuente sobre la gestión y el rumbo político.