En San Luis llegó una "alternativa peronista" dentro de Juntos por el Cambio (JxC) para acabar con la hegemonía del Clan Rodríguez Saá. Allí decantó en Claudio Poggi como gobernador.

Ahora bien, los problemas no se hicieron esperar desde los ministerios de Salud y Desarrollo Humano provinciales, presididos por Teresa Nigra y Gustavo Bertolini respectivamente. Ya que, se estaría dejando en un abandono a los centenares de pacientes oncológicos.

"Suspendieron la entrega de medicación oncológica y los tratamientos, hace más de 2 meses", resaltaron en diálogo con NOVA varios pacientes desde San Luis. Y añadieron: "Como consecuencia hay varias gravedades. No se puede creer la negligencia de la gestión de Poggi".

2 meses sin respuestas

Silvina Ayrala, una paciente de 40 años con linfoma no Hodgkin, denunció que el gobierno provincial tardó 2 meses en abonar un estudio oncológico que su médica le solicitó con urgencia en julio.

A pesar de que la especialista indicó que el análisis no podía demorarse más de dos semanas, Silvina tuvo que atravesar una larga espera y trámites burocráticos para obtener una respuesta.

El 17 de julio, su oncóloga solicitó un estudio urgente valuado en 600 mil pesos, pero a pesar de la gravedad del caso, la respuesta del sistema de salud fue extremadamente lenta.

"Estoy hablando de una paciente con cáncer, esto debería ser rápido, sin tener que pasar por toda esta burocracia", reclamó Silvina, quien intentó en varias ocasiones contactarse con la ministra de Salud, pero solo fue atendida por su secretaria.

"Le expliqué mi situación, estaba devastada porque ya no tenía fuerzas. Mi cáncer es agresivo, las células crecen rápido, y necesitaba el estudio con urgencia", relató Ayrala.

Sin embargo, no fue hasta que el caso se difundió en los medios locales que el gobierno finalmente realizó el pago al centro de salud en Córdoba el pasado jueves.

Silvina explicó que si tuviera el dinero no estaría "mendigando", ya que el estrés emocional y físico que conlleva luchar contra el cáncer se ve agravado por la falta de recursos. "Ya hemos pagado dos estudios este año, y es horrible tener que pasar por esto", lamentó.

La paciente cuenta con el apoyo de su familia y amigos, quienes han organizado rifas y donaciones para cubrir parte de los costos de los estudios y la medicación. Silvina tiene tres hijos, de 3, 17 y 21 años, y un esposo que la acompaña en este proceso.

"Quiero que mi familia me vea bien, siempre he sido alegre, bailo y canto. No quiero que esta enfermedad cambie quién soy", expresó, pidiendo además que en el futuro el sistema de salud responda con mayor celeridad a las necesidades de los pacientes oncológicos.

Su caso es un recordatorio de los desafíos que enfrentan las personas que padecen enfermedades graves cuando el acceso a la atención médica se ve condicionado por trámites burocráticos y demoras en los pagos.