La noche en que se conoció el triunfo (por escasos puntos) de Pablo Javkin, en Rosario (provincia de Santa Fe), centenas festejaron.
El obelisco se tiñó de colores, el centro se iluminó, subió la venta de hamburguesas y los vendedores de rosas (símbolo del socialismo) hicieron su día.
Esta gente esta con Javkin en serio? Quieren perder a proposito? DE VERDAD EN SANTA FE TENEMOS QUE VOTAR A ESTOS IMBECILES O AL CORRUPTO DE PULLARO SINO SON OTROS 4 AÑOS DE KIRCHNERISMO? Se viene fea para la provincia de la bota... pic.twitter.com/aNl0vj8V3i
— Milei de Central 🇺🇦🐍 (@MileiCanalla) June 27, 2023
No es necesario estar a la altura de "bigote Acosta", para darse cuenta que, la "rosa socialista", es el "choripán" del peronismo. Como también, la "chocotorta" es el ícono gastronómico de las huestes de Iñaki Gutiérrez.
Glamour a futuro
Pablo Javkin disfrutaba de su mejor momento. Retenía en su mano, la herencia socialista de 3 oxidadas décadas, para "la familia".
Como un hijo dilecto, entre los mandamientos que recitaba para su electorado con carteras "Zara", perfumes caros, estaba este mandamiento: la Gratuidad. Educación laica, salud, aborto, cambio de sexo...
Así, con estas premisas, "Pablito" se encolumnó feliz en el "Frente de Frentes", en con una profusión de amor samaritano casi, al líder del león, que prometía cual Prometeo contemporáneo, quemar con su fuego redentor los pecados del Infierno Comunista, y obviamente, el kirchnerismo ingrato que había llevado los sueldos a 1500 Dólares en su momento en el 2014.
De eso no se habla
Dijo Carlos Menem: "Si yo decía lo que iba a hacer", nadie me votaba. "Pablito", engarzó estas palabras en las fibras íntimas de su corazón, haciéndolas suyas.
Alguien dijo que, cual guerrero alejandrino, se las hizo tatuar en una nalga, pero no pudo ser confirmado. Y menos, si hubo alguna nalgada en la noche de los festejos.
En el nombre de la "Rosa"
Tal es el título el autor Umberto Eco."El nombre de la Rosa", en realidad. Y hay algo que ostenta toda la verdad: El socialismo hizo la construcción social más grande de la historia desde la cultura, además de la salud.
Pero algo, falló. Nadie esperaba que, con el "ajuste a la 'casta'", les iban a llegar a los museos e Intendentes, sumas siderales, millonarias en luz, a los museos y espacios culturales.
Obviaron o ignoraron que, su adhesión al "Leon", implicaba el hecho liso y llano de aceptar el desvalijamiento de la educación, salud y cultura.