La decisión de Horacio Rodríguez Larreta tuvo una recepción diferenciada dentro del tablero político. Aunque podría beneficiarlos, en el Frente de Todos hubo coincidencia en criticar los manejos del PRO: "No sólo cambian las reglas por sus peleas internas, sino que después se llenan la boca con lo de la institucionalidad", se escuchó por todas partes.

Varios son los candidatos y espacios dispuestos a jugar dentro del Frente de Todos en las PASO de la CABA. La primera movida la hizo un  grupo de dirigentes integrado por el diputado nacional Leandro Santoro; el ministro de Turismo, Matías Lammens; la legisladora porteña Claudia Neira -del sector del vicejefe de Gabinete de la Nación, Juan Manuel Olmos-  y Graciana Peñafort, alineada con Cristina Fernández de Kirchner, quien aclaró que se sumaba “a título personal”. De este diálogo surgiría un solo candidato del “albertismo”, que sería el mejor posicionado entre Lammens y Santoro.

La formación de este espacio motivó las críticas del senador nacional, dirigente de La Cámpora y presidente del PJ Porteño Mariano Recalde, quien declaró con sarcasmo que “hay algunos dirigentes muy ansiosos por su candidatura". Recalde definió a este grupo como "el armado del albertismo", aunque los participantes lo desmintieron.

El senador de La Cámpora sostiene que "las candidaturas es lo último a resolver. Lo principal es plantear la idea de que el gobierno de la ciudad no es bueno, generar la expectativa de que se puede hacer algo mejor." Expresa así la indefinición de su agrupación respecto de nombres y estrategias respecto de las elecciones porteñas. Sin embargo, un sector de la agrupación enseña del cristinismo respalda las candidaturas de la legisladora y flamante Secretaria de La Cámpora, Lucía Cámpora, y al ex secretario de Comercio y actual ministro de Producción bonaerense, Augusto Costa. Pero la confrontación interna es sanguinaria.

Quienes también anunciaron su postulación fueron Pedro "El Cadete" Rosemblat y Ofelia Fernández, quienes comenzarán a recorrer unidades básicas porteñas. Expresan al sector referenciado con el diputado Itaí Hagman y, a nivel nacional, con Juan Grabois.

Otra dirigente que expresó su intención de postularse es la ex ministra de Mujeres, Elizabeth Gómez Alcorta, con el apoyo de dirigentes sindicales y sociales.

Quien también se lanzó fue el juez camarista Juan Ramos Padilla, aunque no queda claro quiénes lo apoyarían, tras descartarse al sector de Claudio Lozano.

Como en el caso de Juntos por el Cambio, la interna del Frente de Todos porteño es un verdadero aquelarre. En ambos casos expresan lo mismo: la vacancia en la conducción de ambas coaliciones. Y una misma preocupación: cómo impedir que Javier Milei continúe capitalizando su abandono de la sociedad durante tantos años.