El presidente del PJ platense, Ariel Archanco, lanzó su candidatura a intendente junto a un grupo de militantes mayoritariamente compuesto por ex funcionarios y dirigentes provenientes del espacio de los hermanos Bruera (Pablo, Gabriel y Mariano).

Lo hizo en un acto realizado ayer en un camping de Los Hornos. Casualmente fue en el marco de los festejos de la Independencia nacional y con un claro mensaje hacia la Cámpora.

En el complejo de Los Hornos denominado “Las Casuarinas”, este 25 de mayo frente a un centenar de invitados que degustaron un rico asado, se podía repetir e incluyó bebidas, todo sin cargo alguno, el líder del PJ platense, Ariel Archanco, encabezó un acto político, el primero desde que asumió el liderazgo del Partido, mostrando el rumbo que tomará puertas adentro marcando una profunda relación con militantes provenientes del bruerismo.

Archanco, considerado por su círculo más cercano como amarrete y de no cumplir acuerdos políticos, no dejó nada librado al azar y metió la mano en el bolsillo para agasajar a los militantes aportados por el sector que encabeza el ex Randazzista, luego Bruerista y “hacedor de recursos” de la Cámpora: Sergio “El Tano” Mannarino.

El “Tano” como se lo conoce, tuvo un vínculo muy fuerte con Pablo, Gabriel y Mariano Bruera a quienes se acercó en el 2017 para unirse a Unidad Ciudadana luego de haber enfrentado en varias oportunidades al kirchnerismo, espacio que lo acogió en lo últimos años y que se fue metiendo a los codazos.

En esta oportunidad, el uno del peronismo local se presentó con todos ex dirigentes del bruerismo platense: el referente de Villa Elvira, Nicolás Gigena, que viene de jugar en el espacio de Guillermo Escudero; Marcela Pastore del Pami Los Hornos; el ex consejero escolar Guillermo Correa, la dirigente de San Carlos, Viviana Casarini, la directora del RENAPER La Plata, Vanesa Baligan, además, del actual director de la Región Sanitaria XI, Claudio Cardoso.

Se sabe, que el ex concejal intentó lograr consensos entre los viejos referentes del PJ para poder “peronisarse” pero el ex militante del castagnetismo en La Plata, no pudo convencer a aquellos que prefirieron continuar vinculados a Julio Alak, ni sostener a un pequeño grupo que se le había sumado en su carrera hacia la legislatura y solamente le quedó la chance de aspirar a contener a los brueristas antes que se vayan a militar con Tolosa Paz o Julio Garro.

Cada vez más alejado de sus socios de la Cámpora y creyéndose omnipotente en las decisiones luego que lo pusieran a dedo a cargo de los destinos del Partido Justicialista, Ariel Archanco, salió a cortarse solo y promover su figura hacia la Municipalidad de La Plata.