La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, en St. Agatha Church, Miami, Estados Unidos, visitó este domingo a monseñor Silvio José Báez, obispo católico nicaragüense (obispo auxiliar y vicario general de la Arquidiócesis de Managua), acompañada por Paula María Bertol, ex embajadora ante la OEA. 

Conversaron acerca de la persecución a la Iglesia y el ataque a la libertad de culto que hoy reina en Nicaragua, como así también de la situación de persecución y amenazas de muerte que vivió en carne propia el obispo Báez, antes de tener que abandonar Nicaragua. 

Más tarde, Bullrich participó de un conversatorio acerca de los derechos humanos en Nicaragua y la seguridad jurídica en América Latina. El mismo estuvo centrado en las dictaduras de la región con especial hincapié en el régimen de Ortega, tras la reciente liberación y expatriación de los 222 presos políticos a los que también se los despojó de su ciudadanía. 

El evento fue convocado por la Comisión Permanente de Derechos Humanos de Nicaragua (CPDH) organización que trabaja para la construcción de la paz y la defensa de los derechos humanos de los nicaragüenses. Allí se escucharon testimonios dramáticos como el de una mujer liberada y expulsada de Nicaragua, quien durante el encuentro expuso con detalles las innumerables torturas y vejaciones a las que fue sometida mientras estuvo prisionera del régimen de Ortega por más de 18 meses. 

Paula Bertol también participó del encuentro y se refirió a los avances de la causa penal que se inició desde Argentina contra Daniel Ortega y Rosario Murillo contra los crímenes de lesa humanidad cometidos en Nicaragua, expediente cuyos querellantes son patrocinados por el estudio jurídico de Richarte y Pirota. 

El cierre estuvo a cargo de la Dra. Patricia Bullrich quien alentó a los nicaragüenses a que sigan luchando, haciéndoles saber que acompaña la lucha de todos los que hoy sufren a manos de la tiranía y que, finalmente, va a haber luz entre tanta oscuridad. 

Participaron del encuentro parte de los 222 presos políticos liberados y expatriados por el régimen nicaragüense, y jóvenes involucrados con la búsqueda de la restitución de la democracia en ese país.