Los gobernadores volvieron a la carga para pedir que se eliminen las primarias en 2023 con el respaldo del cordobés Juan Schiaretti, pero para llegar a una mayoría en la Cámara de Diputados necesitan sumar algunos aliados como los liberales de Javier Milei o los emisarios de Roberto Lavagna.
Sin ellos, aún con el respaldo de Schiaretti y el resto de los partidos provinciales no será fácil llegar a los 129 votos necesarios para abrir una sesión y votar una ley electoral.
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— Feli Me Muero (@Felimemuero) September 17, 2022
Lavagna y Milei tienen los votos claves para eliminar las primarias https://t.co/I8Nd4sByoN
Por ahora, quienes se saben decisivos prefieren esconder su voto a la espera de un proyecto de ley y, sobre todo, de un pronunciamiento de Cristina Kirchner, quien en 2021 frenó una iniciativa similar.
"No hay ningún legislador del oficialismo que hable del tema. Hasta que no se inicie el tratamiento no tiene sentido pronunciarnos. Ya nos pasó el año pasado de hacer cuentas y que no se debata nunca", le dijo a uno de los diputados con el voto decisivo.
Las primarias funcionan desde 2011 y son de gran utilidad para el frente opositor de turno, porque permite ordenar su oferta en comicios organizados y financiados por el Gobierno.
El año pasado, le permitieron a Juntos por el Cambio resolver internas en 17 de las 24 provincias, con competencias de varios candidatos y gran capacidad de retener el voto del frente en las elecciones generales. Los gobernadores peronistas querían eliminarlas, pero no lograron consenso interno en el oficialismo.
Para el año próximo, JxC necesita las primarias para definir su candidato presidencial y cualquier otro esquema condicionaría a los aspirantes. Tal es así que en el Congreso hay quienes piensan que si se eliminan se forzaría una elección con varios candidatos presenciales y final abierto, similar a la de 2003.
En 2020 el proyecto para suspenderlas fue presentado por el diputado tucumano Pablo Yedlin, cercano al entonces gobernador Juan Manzur, nunca se trató y Máximo Kirchner negoció con el PRO posponer la fecha para votar con más gente vacunada contra el Covid 19. Y eso fue lo que se ocurrió.
Los gobernadores habían logrado respaldo de Sergio Massa, pero Máximo logró imponerse junto a Eduardo De Pedro, el ministro del lnterior y a cargo de organizar las elecciones.